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Se trataría de una propiedad arrendada a un hombre de 60 años, quien no cumpliría con los cuidados respectivos.
Una grave situación sanitaria quedó al descubierto esta tarde en Calama, luego de que la seremi de salud, corroborara en una vivienda del sector nororiente, la existencia de fuertes olores, moscas y material putrefacto en el que coexistían 14 canes.
Sandra Flores, jefa de la oficina provincial de Calama de la seremi de salud, explicó que un operativo liderado por la entidad que dirige y con el apoyo de la Bidema, seguridad pública del municipio loíno, la oficina de tenencia responsable del departamento de aseo y ornato del propio organismo edil y carabineros, procedió a ingresar un inmueble ubicado en calle Guacolda a la altura 2 mil 500. Esto, en el marco de una denuncia ciudadana y con el objetivo de tomar las medidas sanitarias correspondientes.
Puntualizó que el problema estaba circunscrito a un sector de la vivienda, arrendado a un hombre de unos 60 años, que al momento de la fiscalización no se encontraba en el lugar pero que claramente no tenía ninguna preocupación por la salubridad de éste.
La Jefa de la Oficina de la Seremi, comentó que el olor era tipo amoniaco, a lo que se sumaban fecas, orina en descomposición, desperdicios y artefactos eléctricos en desuso, en un espacio de 12 x 3 metros aproximadamente en el que habitaban asimismo 14 perros. «Los canes fueron retirados por el Municipio y llevados al canil», destacó.
La Autoridad Sanitaria procederá a la investigación de los hechos, lo que podría desembocar en el inicio de un Sumario en contra del arrendatario.
El individuo se expone eventualmente a sanciones que van entre un décimo a las mil UTM, de acuerdo al Código Sanitario, teniendo la obligación de limpiar y sanitizar el lugar.
