19 personas se han visto afectadas por enfermedad transmitida por las mascotas.
Hidatidosis. Así se llama la patología parasitaria que puede ser transmitida desde los perros al humano, dañando principalmente el hígado y pulmón y que ha aquejado a 19 personas en la región durante los últimos 5 años.
Así lo dio a conocer la Seremi de Salud de Antofagasta, Jéssica Bravo, quien explicó que «la enfermedad puede ser prevenida exitosamente con una adecuada desparasitación de las mascotas cada 45 días, mediante un comprimido antiparasitario que contenga el principio activo «praziquantel» de 50 milígramos para perros de 10 kilos y cuyo valor bordea los 2 mil pesos».
«La Hidatidosis -detalló- afecta al ser humano, el que actúa como hospedador intermediario del parásito Echinococuss granulosus, causante de la patología. Puntualizó que las personas se infectan al ingerir huevos del parásito por la contaminación del ambiente provocada con heces de perros. Los animales pueden potencialmente infectar con huevos los alimentos o aguas destinadas al consumo humano, o bien, mediante el contacto directo con las mascotas al acariciarlos o cuando lamen a sus dueños. Los canes, dijo, eliminan los huevos por las heces quedando algunos de ellos adheridos al pelaje del animal».
Se trata de un ciclo, explicó que «los perros comen vísceras crudas de animales faenados, infectados con el parásito, como cabras, ovejas, vacas y llamas. Al defecar, los perros contaminan el pasto, las verduras, los frutos, silvestres, el agua y su propio pelaje, afectando tanto a los citados animales como al ser humano. Los factores de riesgo incluyen condiciones precarias de saneamiento básico y ordenamiemto ambiental en las viviendas; deficiente higiene de manos particularmente en niños; transmisión indirecta a través del agua y hortalizas; mantener prácticas de alimentacion de perros con vísceras crudas de animales sacrificados en el hogar y contacto estrecho con mascotas sin desparatización interna».
La personera, subrayó que «la prevención incluye justamente una adecuada y permanente desparasitación de los perros por parte de sus dueños, acción que la propia Autoridad Sanitaria ha facilitado de manera gratuita en el marco de los operativos de vacunación antirrábica; impedir que los perros ingieran vísceras de los animales faenados en casa, además de una correcta higiene de manos».
Vianka Zepeda, Jefa del Depto. de Salud Pública de la Seremi de Salud, comentó que «la institución sanitaria, mantiene un estricto programa de vigilancia epidemiológica que incluye la coordinación con la Red Asistencial para la toma de muestras de los afectados, mientras que el área de Zoonosis de la propia Autoridad Sanitaria realiza vigilancia ambiental a través de la toma de muestras fecales de los animales. Detalló que el agente patógeno penetra la mucosa intestinal hacia los vasos sanguineos y viaja a los órganos donde generan una masa multinucleada que se vacuoliza y crece constituyendo finalmente los quistes hidiáticos principalmente en el hígado, pulmón y en menor medida en el cerebro y corazón».
«Los quistes crecen lentamente y pueden sobrevivir por años o décadas e incluso llegar a calcificarse sin necesariamente producir síntomas, debiendo ser extirpados mediante una acción quirúrgica. En muchos casos – añade – la infección es detectada incidentalmente a través de un examen de imagenología. Acotó que cuando se generan síntomas, éstos se deben principalmente por el efecto de la presión que ejerce la masa del quiste sobre el órgano donde se aloja o debido a una ruptura espontánea o traumática del quiste, lo que puede provocar entre otros, una reacción anafiláctica (erupción cutánea, náuseas, vómitos, dificultad para respirar y shock)».
La vigilancia epidemiológica de la Autoridad Sanitaria, reporta durante los 5 últimos años, 19 personas afectadas por la enfermedad, cuya edades fluctúan entre los 6 y 81 años. Las acciones de investigación señalan que un tercio de éstas se habrían contagiado en la región, mientras que el resto, en otras zonas del país y también en el extranjero. Además de las acciones quirúrgicas, las personas afectadas por Hidatidosis son sometidas a tratamiento farmacológico mediante albendazol.