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Asimismo, el congresista cuestionó el trabajo efectivo del ente persecutor.
Con inquietud y haciendo un llamado al ministerio del Interior a presentar, cuanto antes, el proyecto que pretende agilizar las expulsiones de aquellas y aquellos extranjeros que se encuentran en forma irregular en en el país y que no han querido normalizar su situación reaccionó el senador, Pedro Araya Guerrero, tras los delitos cometidos en la Región de Antofagasta y los datos, tanto de la División de Estudios de la Fiscalía Nacional como de Gendarmería, que ratifican una alarmante realidad.
“Se habla mucho de la situación en el sur del país, pero poco vemos, leemos o escuchamos sobre lo que acontece en el norte grande y especialmente en Calama, Tocopilla, Mejillones, Antofagasta, las cifras que hoy conocemos dan cuenta de que necesitamos un trabajo integral y urgente en la región, tanto con un Estado de Excepción Constitucional, como medida provisoria e inmediata, mientras legislamos sobre algunas modificaciones, como la de agilizar las expulsiones de personas que han ingresado de forma irregular al país y no han querido regularizar su situación”, expresó el parlamentario antofagastino.
Una de las cifras que más preocupa es la que entrega el Análisis Descriptivo del Homicidio Consumado en Chile 2016 – 2020 de la Fiscalía Nacional División de Estudios (Septiembre 2021). Según el documento, las regiones que presentan mayor proporción de extranjeros imputados por homicidios consumados son las regiones de Tarapacá, Arica y Parinacota y Antofagasta, esta última llega a un 15,9%.
Por otra parte y según la “Caracterización de Personas Privadas de Libertad” publicada en el sitio oficial de Gendarmería, del total de personas extranjeras que se encuentran recluidas, aparecen en primer lugar los bolivianos, seguido de colombianos y más atrás venezolanos.
De acuerdo al Ministerio Público, el año 2020 las regiones que presentaron las tasas más altas de homicidios fueron las regiones de Antofagasta, Metropolitana Centro Norte y Sur.
En este sentido, en el mencionado año, la tasa de asesinatos, en la Región de Antofagasta, llegó a 7,5, cada 100 mil habitantes, mientras que en 2016, esta alcanzó los 6,4.
Otro de los datos que también llamó la atención del senador Araya es la población penitenciaria de Antofagasta. Según consta en el sitio oficial de Gendarmería, las personas recluidas ascienden a un total de 2.261 personas a julio de este año, mientras que en marzo de 2019 eran 2.639 personas.
“Llama la atención que si bien los delitos han aumentado en la región, especialmente en el caso de delitos violentos, como el homicidio, la población penal haya disminuido, desde el 2019 a la fecha. En este sentido, cabe preguntarse si existe menor eficacia por parte del ente persecutor en el esclarecimiento de delitos y en el logro de condenas responsables”, puntualizó el legislador.
