Los estudiantes de escuelas y liceos de Calama fueron premiados por su participación en el certamen comunal que convocó a 114 jóvenes.
Con lectura, música y mucho entusiasmo se realizó una jornada de reconocimiento de 14 alumnos destacados del Concurso Comunal de Cuentos que organizó la Corporación de Desarrollo Social de Calama, en el cual participaron 114 obras enfocadas en la identidad local, abordando temáticas relacionadas con el cuidado del medioambiente, el paisaje urbano, la influencia de la minería, el tren y la vida de los animales que rodean el río Loa, como los conocidos zorros del desierto.
La actividad se llevó a cabo en la Escuela D-48 Presidente Balmaceda, en donde la alumna del Liceo Bicentenario Luis Cruz Martínez, Cristina Araya, leyó su obra Tren de muerte o de muertos, cautivando a los asistentes.
Eduardo Soto, director de educación de Comdes, destacó la labor de los profesores al incentivar la escritura y del jurado en cuanto a realizar la selección de las obras literarias. “Un cuento es corto, pero relata una historia, una vivencia, una anécdota y lo que es más importante: la comparte. Y las vamos a seguir compartiendo, porque vamos hacer que estos cuentos lleguen a todos los establecimientos para que también sirva de apoyo, de una u otra forma, para otros estudiantes y sea incentivo para que otros se animen a escribir a contar su historia”, dijo Eduardo Soto.
Cristiana Araya, alumna del 7mo B del liceo Luis Cruz Martínez, contó que “lo que inspiró fue la idea que tenía sobre la ciudad y pensar en conceptos que solamente la ciudad tenía. Por ejemplo, el tren, ya que en otras ciudades de hecho ya casi no se ve. En esta es una de las que pasa constantemente y por lo menos a mí me llama mucho la atención”.
La alumna relató que le interesa la animación de videojuegos y que la capacidad para contar historias le sirve mucho, ya que forma parte de las bases de esta área. “El escribir me ayuda al planificar muchas cosas. Como por ejemplo el dibujo. A mí me gusta el tema de la programación de videojuegos, entonces el escribir historias es, en sí, la base y también explayarse en las historias”, agregó Cristina Araya.
Ignacio Aguirre, estudiante del 8vo C de la Escuela D-37 República de Bolivia, fue otro de los alumnos reconocidos en el concurso por el cuento Las Lagartijas de Calama del que es autor. Sobre la historia contó que “se trata de las lagartijas de Calama, que hace mucho tiempo habitaban y que guiaban a cada ser humano por su paso. Y lo que me incentivó es mi profesora me dijo que es con nota. Así que tuve que hacerlo y no tenía mucha confianza de que ganara un premio como este”.
Malfredo Mamani, concejal de la comuna de Calama, representó al municipio en la ceremonia y comentó que es importante conocer estas historias que relatan los jóvenes de la comuna, ya que ellos pueden aportar con una “visión más llamativa y sensible a la cotidianeidad nuestra”.
Por ello destacó lo esencial que es potenciar la habilidad de escribir, la cual protagonizó este concurso en el que, originalmente, se recibieron 114 cuentos, de los que el jurado, compuesto por escritores locales y gente ligada a la cultura, preseleccionó 47 relatos para entregar su veredicto final con las 14 historias pertenecientes a los autores que fueron reconocidos.
“Hay un talento que los niños tienen y las ansias de escribir. Eso hay que fomentarlo. Es una habilidad bastante complicada que hay que desarrollarla, mes a mes, año a año, pero creo que mostrándote a ti 40 cuentos en una situación pandémica indica que los profesores están haciendo un buen trabajo en este aspecto. Un saludo de reconocimiento a mis colegas, a los directivos que han tenido un liderazgo pedagógico fuerte en esta época de pandemia y estos son sus resultados: concurso, escritura y futuros escritores loínos que es lo que la ciudad requiere”, manifestó el concejal Malfredo Mamani.