La educación rural de la comuna de Calama, se prepara para el iniciar las clases el 2 de marzo de este año, tal como dispuso el Mineduc.
Con nuevas salas de clases, comedores, baños, mobiliario, y sin restricción de aforos iniciarán sus clases presenciales los estudiantes de las escuelas del Alto Loa, desde el 2 marzo mientras el Ministerio de Educación (Mineduc) estableció medidas preventivas del covid, como el uso obligatorio de mascarillas para los alumnos mayores de cinco años, ventilación de áreas comunes y la eliminación del saludo con contacto físico en los establecimientos educativos.
En la escuela San Francisco de Chiu Chiu, donde ingresarán 90 alumnos, Humberto Arraya, director ejecutivo de Comdes, manifestó que “estamos visitando la escuela, sus salas de clases y nos encontramos en condiciones para que los niños puedan asistir a clases presenciales; hay algunas mantenciones menores, pero que eso es muy rápido de solucionar”.
A fines de 2021 el lugar educativo fue equipado con nuevo mobiliario para los alumnos mientras la corporación se comprometió a trabajar en los diseños arquitectónicos de un nuevo establecimiento educativo para la comunidad de Chiu Chiu. “Esperamos este año tener la autorización o la aprobación del proyecto y luego conseguir los recursos para su construcción”, planteó al respecto.
La directora del establecimiento rural, Nieves Marín, explicó que de acuerdo a la cantidad de alumnos por curso “vamos priorizando la superficie de las salas y las salas más grandes se están ocupando para aquellos cursos donde tenemos más estudiantes. El año pasado teníamos 94, ahora tenemos 90 y tenemos mucha demanda, pero estamos ajustándonos a las medidas, a las normativas y la verdad que en la escuela los estudiantes conocen las rutinas de seguridad, aseo y las medidas sanitarias que debemos tener como escuela”.
En el establecimiento de Chiu Chiu, Carlos Carrizo, asesor en prevención de riesgos del departamento de calidad, seguridad y medioambiente de Comdes, mencionó que “tenemos que hacer algunas mejoras, pero son menores. Pero tenemos todo implementado para que tengan un retorno seguro nuestros alumnos y funcionarios”.
En la escuela San José de Ayquina, a fines del año pasado, se ejecutó una remodelación de sus instalaciones mediante un fondo FRIL del Gobierno Regional (GORE) de más de 83 millones de pesos, dejando a los siete alumnos con su propio escritorio para estudiar y mejoras en la calefacción que permitirán enfrentar el clima cordillerano del poblado.
EnCaspana actualmente hay bastante movimiento por las obrasde más de 590 millones de pesos del GORE que se ejecutan en la escuela Nuestra Señora de la Candelaria. Remodelaciones que, a pesar de su envergadura, no impedirán el ingreso a clases de los 15 alumnos del establecimiento.
“Estamos haciendo esta visita con el equipo tanto de prevención, planificación y administración para ver en terreno en qué condiciones está nuestra escuela de Caspana y nos vamos bastante tranquilos y contentos por las nuevas salas para nuestros niños totalmente habilitadas y en condiciones para poder iniciar las clases. Eso es lo importante: priorizar que los niños tengan un lugar seguro para iniciar las clases y para ello hemos visto un avance bastante grande con respecto al proyecto que se está ejecutando en nuestra escuelita”, comentó Humberto Arraya.
Este año la matrícula de la escuela básica rural Pukará de Lasana es de 20 alumnos y recientemente se habilitaron nuevos servicios sanitarios para ellos y personas en situación de discapacidad por un Fondo Escolar de Minera El Abra.
El establecimiento también contará con nuevo mobiliario en el comedor y más material didáctico, como juegos para aprender sobre matemáticas.
En Toconcela pandemia provocó el retorno de familias desde las ciudades, por lo que aumentó la demanda histórica de una escuela, la cual se hizo real en noviembre de 2021 con la gestión deComdes. Este año la escuela del poblado andino volverá a clases con sus seis alumnos.
Leonardo Yufla, presidente de la comunidad de Toconce, comentó que “la visita de Comdes me parece positiva. El compromiso de ellos fue de que nunca se iba a cerrar y ahora están acá para ver detalles, cómo van los trabajos o qué falta. Y decirle a la comunidad que esté tranquila que esto va a seguir. Muy bien para mí ha sido grato una reapertura de un colegio para este pueblo”.
El dirigente de la comunidad contó que el año pasado se juntaron los ex alumnos de la escuela del poblado en un acto y recordaron tiempos en los que habían más de 80 estudiantes. Él anhela que las cosas vuelvan a ser así. Para eso cree que se necesita que haya más posibilidades de trabajo para la comunidad. “La pandemia ha sido terrible, pero acá en los pueblos es una tranquilidad tremenda. Y los niños están acá y yo creo que esto va ser un incentivo para que los niños vuelvan”, dijo el presidente de la comunidad de Toconce.