Se trata de un extrabajador de la empresa minera estatal, Wilson Milla Quintana, quien transformó diferentes espacios de su domicilio con adornos navideños.
Por el tema de los aforos permitidos en tiempo de pandemia por el coronavirus, Wilson Milla Quintana, debió reducir la cantidad de personas que recorren las diferentes habitaciones de su hogar, ubicado en calle Santiago 3035 de la villa Las Vegas de Calama, donde en cada mes de diciembre lo transforma en la “Casa Navideña”.
Si bien, antes este extrabajador de la empresa minera estatal cuprífera, era conocido como “Antony” por el segundo nombre, aunque en la actualidad representa al “Señor Navidad”. Una tradición que partió hace 15 años atrás, cuando decidió comenzar con esta tradición de adornar su vivienda con diferentes espacios destinados a esta festividad de amor y paz.
En su recuerdo rememora el momento que cambió la forma de pensar, “en cierta ocasión en un centro de niñitos muchos casos vulnerables, y decidí llamar a mis amigos y compañeros de trabajo para que me aportarán con algunos regalos para ir a entregarlos en víspera de Navidad”, señaló con la vestimenta clásica de Santa Claus.
“Ver la carita de alegría y la sonrisa de los niños es realmente maravilloso”, detalló al respecto, algo que no ha logrado repetir en los últimos años por la pandemia. Pero, de igual manera con el aporte de algunos dulces de amigos y familiares salió el año pasado al sector poniente de la capital de la provincia El Loa, para llevar en caravana algo de alegría, algo que pretende repetir este año.
Cuenta con una villa navideña que representa uno de los principales tesoros que luce con alegría y orgullo, indicando que cuenta con más de 500 casas, algunas de las cuales adquirió en la Feria de Las Pulgas, donde después de comprarlas debió arreglarlas por las condiciones de deterioró en la que estaban.
- ¿Cuenta con un circuito navideño en la casa?
- Sí, comienza en el antejardín con la ciudad de Santa, al igual que con el coro que adquirí en Lima, Perú, donde reside uno de mis hijos. También está el tradicional nacimiento, que cada año lo cambio para que no sea igual, y continúa con un espacio con cascanueces y campanas, con una repisa que tiene más de mil viejitos pascueros, de diferentes portes y también origen de cada uno de ellos.
- ¿Cómo llegó a tener tantas figuras y adornos de navidad?
- Algunos me los han regalado, y otros los he adquirido, que representan prácticamente el 90%, donde en más de alguna oportunidad no están en buenas condiciones, están deteriorados, y yo debó arreglarlos. Es por eso que la navidad para mí no es tan solo un mes, sino prácticamente todo el año.
- ¿Qué es lo que más resalta?
- La ciudad o la villa navideña, que cuenta con más de 500 casas. Esta resalta y la gente lo destaca.
- ¿Cómo partió está tradición? Es un tema familiar.
- Es todo lo contrario. Porque antiguamente no se celebraba la navidad de esta forma. Era un regalo y nada más. Ahora mis hijos están sumándose a esta tradición navideña.