Con más de cinco años en Primera B, y luego de varias temporadas en falso producto de resultados adversos que manchan parte de la rica historia del club, la nueva derrota que sufrió el cuadro loíno marca un nuevo hito en rojo.
Volvió el fútbol profesional a Calama luego de casi seis meses de paralización obligada producto de la pandemia y, lamentablemente, lo hizo de la peor forma para Cobreloa, equipo históricamente gigante que sufrió una nueva derrota marcando así un hito negativo dentro de su generoso palmarés estadístico.
La de ayer no fue una derrota cualquiera, y no solo porque Cobreloa cayó ante el colista del certamen (lo que ya es motivo de reproche), sino que además porque la victoria trabajada y merecida de los forasteros, se apunta como la primera en la corta historia de duelos que han tenido ambas escuadras.
Y si bien la historia no juega y bien lo saben los loínos luego de más de 5 años en Primera B, no deja de ser cuestionable los récords negativos que suma y sigue el elenco minero de un tiempo a esta parte, los que han enlodado la rica historia del Gigante que está sumido en una mediocridad preocupante y que genera incertidumbre entre sus hinchas, quienes no saben si Cobreloa es el que sale de visita y gana sus partidos, o el que cae estrepitosamente en Calama con escuadras como Magallanes y Santa Cruz.
Desarrollo
El encuentro de ayer fue de lo más aburrido que se ha podido ver en los últimos tiempos. Ya sea por la ausencia obligada de sus hinchas, el horario, la falta aún de fútbol u otro condimento, pero la lentitud fue predominante en el desarrollo del partido que además será recordado por ser el primero en la historia en ser jugado en nuestra comuna estando en cuarentena.
Santa Cruz ganó por la mínima con gol de Fabián Carmona, y entre sus posibilidades hizo el partido perfecto para cerrar el marcador y llevarse los inéditos tres puntos desde Calama. Fue una misión muy trabajada que le trajo excelentes dividendos a los dirigidos por Osvaldo Hurtado, a quienes no les sobró nada y merecidamente ganaron el duelo, eso hay que dejarlo en claro.
Sin embargo, aquello es precisamente lo que no deja de preocupar, ya que un equipo con lo justo vino a Calama y se plantó de igual a igual contra el equipo cuyo plantel es el más caro del certamen, y lo hizo ver muy feo.
¿Falta de jerarquía?, ¿falta de hambre?, no hubo convicción?, son algunas de las preguntas que uno se hacía mientras veías in situ este encuentro para el olvido. Una lamentable exposición que se aleja contundentemente de lo que por historia ha sido Cobreloa, y que con esta nueva derrota (la segunda seguida en casa), continúa hundiendo la gloriosa historia que por años fue escrita con sudor y sacrificio por distintas personas, tanto dentro como fuera de la cancha, y que hoy deben ver con impotencia en lo que se ha convertido nuestro querido club, el que claramente ayer no jugó y sigue en una categoría que no se condice con la representatividad histórica que tiene como legado.