La iniciativa fue concretada por la Conadi.
Más de 70 familias pertenecientes al Campamento Indígena N°1 Lickan Antai de Calama, recibieron recientemente el certificado de uso y residencia de la Conadi, que les permite individualizar el sitio designado para cada uno de ellos dentro del espacio territorial en donde están habitando en la actualidad.
Una de las beneficiadas resultó ser Angélica Oyarzún, quien desde hace nueve años, se encuentra habitando en este lugar. “Esto nos permite proyectarnos de alguna manera, e iniciar las gestiones para obtener el título de dominio”, confidencia con la alegría de haber dado un gran paso.
Lo que le permitiría construir con material más sólido, ya que en la actualidad, las mejoras son de material ligero, con toda la problemática que aquello significa para ellos.
En relación a la entrega de estos documentos a estas familias, el encargado de la unidad jurídica y actualmente jefe subrogante de la oficina de Conadi, Pablo Madariaga, explicó que “nosotros entregamos certificaciones a familias de la mitad del campamento Lickan Antai, aproximadamente 72”.
Aclarando que “lo que certificamos es el uso y residencia, e individualizar a la familia a un sitio designado. Esto con el objeto que la familia tengan más seguridad y certeza que sabemos que están habitando, y no sean desalojadas por menos por parte de esta institución”.
Asimismo reconoció que “efectivamente la manzana completa esta a nombre de Conadi, y estas familias llegaron aproximadamente hace ocho o nueve años, y nosotros lo que hacemos con esta certificación es acreditar el uso y residencia de las familias asociadas al sitio, para que puedan tener cierta seguridad y se puedan desarrollar a futuro”.
Pero, la tarea aún no termina, en cuanto, manifestó que “lo que estamos haciendo actualmente es trabajar respecto de la otra mitad de las familias de Licúan Anta, que también son aproximadamente 70 o 75, que hicieron ocupación posterior del terreno, hace cuatro o cinco años”.
“Estamos trabajando para dar la misma certificación”, puntualizó. Es decir, de uso y residencia en esta área de propiedad de la Conadi.